Festividades de la Nutria

Pues sí, fue el día internacional de la nutria, el cual se celebró con leche y hot cakes con crema de cacahuate Aladino. Al parecer es alimento experimental nutril. Mucha plática, un poquito de violín, pero muy bonito todo. Aquellos que alegaron no haber sido invitados no comprenden la naturaleza del evento. No había invitación, es como si para el día de los santos inocentes, la gente necesitara una invitación para hacerle bromas a los demás. No. En el día de la nutria, la gente va y visita a su nutria favorita. Los que no fueron es porque no tienen nutria favorita. YO sí.

Otherwise, el día de hoy promete varias cosas. Y eso me da mucho miedo por muchas razones.

See you soon, esto de bloggear ya me está cansando.

Beaten senseless

Sí. Hay pocas partes de mí que aún sienten cosas. Las otras están confundidas y no saben a dónde van. Otras siguen su vida como si nada hubiera pasado, pero hay otra cosa que las detiene de pronto y las abofetea como Homero lo haría.

El sábado es el día internacional de la nutria, también es la boda de mi tío y un posible encuentro para ver Lodoss.

Por eso siempre pensé que debería de andar por la vida sin amigos. Está bien mal plan eso, y no sé si lo crea de verdad. Pero siempre tuve la sensación de que o toda la gente del mundo era demasiado high maintenance o nomás yo no servía para estar ahí para todos a cualquier hora que me necesitaran. It's the burden of friendship. Other burdens have pushed them aside. Y nimodo. Pero las otras urgen más. That's why the others were pushed aside. Duh.

caring

ok, ya. Yo sé que ya fue un chorro de mushy stuff. Qué quieren, I'm in love. Thought would never happen, took me by surprise kind of thing. De todas formas, no es lo único que hay por aquí. Aparte, no es como que los otros blogs se tratan de otra cosa. Somos un montón de niñas que quieren a los niños. Bueno, talvez una que otra quiere a sus tortugas, pero bueno, en gustos se rompen géneros.

La escuela me tiene harta. HARTA. Bueno, la escuela en sí no. Lo que me tiene harta es la tarea. Desde que estoy en tercero de primaria he dado muestras explícitas de que me choca CHOCA la tarea.

Debo ir por mi tarjeta de débito. Cosas buenas empiezan a pasar, sobre todo mucho trabajo. Me gusta trabajar y que me lluevan ofertas de trabajo del cielo. Es bonito. Suza, dile al señor que si no me da trabajo que voy a quemar sus libros. Bueno, me voy a comer. Sobres.

P.S. Un minuto de silencio por Xösy que murió ahogado en ácido. Gran pérdida, de verdad. Ahora QB tiene sólo un cuervo en el hombro y nada que hacer, mientras el resto es asesinado adentro. *sigh* *minuto de silencio*

Un cuarto del mundo trabajando por MI felicidad

Hoy, muy temprano para algunos, algo tarde para otros, pero a las nueve y media para mí, descubrí que alguien furtivamente había puesto en mi mochila una cosa plastificada en forma rectangular de estilo cajita que ocupaba mucho del espacio que antes ocupaban sólo mis libros.

Al revisar más de cerca, y sentarme en una banca para poder pensar bien, mis sospechas se confirmaron. Eran unos marcadores, 100, como los de Beatriz, de Soriana. Al parecer mañana son 100 días.

Y bueno, estoy feliz y contenta. Espero que a alguien se le pegue. Ahorita no hay mucho más que decir, excepto que 100 marcadores de todos los colores posibles es un regalo mallavilloso.

HEAVY

By the way, la repetición así como está allá es tan tan tan alentadora y bonita. El "problema" aquí es que a cada minuto I fall in love again. It's very enjoyable, you should try it some day.

He´s so...

Yo tengo la suerte de saber lo que es el amor de verdad. El físico y mental. El que no es una simple idea, pero todo. Todo de alguien. Y yo tengo la suerte de que alguien la haya regado. Suerte. Sí. Pero después de tantas cosas horribles que me han pasado y que me han hecho creo que es bonito tener algo tan de verdad al lado mío. Tan de verdad y tan al lado. Hay varias cosas de mí que se van a tener que ir despidiendo. Son cosas feas, no se preocupen. En serio pienso que debo de ser bonita. Y que si hay cosas feas que son parte de mí, deben de ser diluídas las tolerables, asesinadas las demoníacas.

Amor para todos. Pero del que yo tengo, nada más para mí. No se los presto. Es mío. Y si me quieren no me lo van a pedir. Van a querer que me lo quede yo, porque me hace feliz. Feliz de verdad, no de hace dos semestres y para atrás. Feliz de no tener que fingir nada. Y no saben, es un peso gigante que se me quita de encima. Claro, viene con un peso mucho más grande, pero esta vez es sólo metafórico :D

Lulu es una tonta, tontisima

Pues sí, al contrario de lo que les pueda decir Lou, esto es muy cierto. Blah...
Esque está aquí, si no, otra cosa sería.
Hace mucho que no bloggeo, y sí hay algo que quería bloggear. Ahí va.

Hace algunos días, según yo, Finger se iba a morir.
Para los pocos de ustedes que saben la catástrofe que esto significa, sigan leyendo, se pone apasionante. Para los que no saben qué está pasando, sigan de largo a otro blog, que si están leyendo éste estoy segura de que conocen más. Si no, al lado hay una bonita lista de opciones.

Pues sí, estaba en mi cama y llegó Finger. Se había peleado uno o dos días antes en el techo de mi casa. Se oyó épico el asunto. Y cuando lo vi tenía los ojos cerrados, rojos completamente, de color sangre, no la cosa rosa que nos pasa a nosotros cuando tenemos los ojos "rojos". Lo acaricié tantito, preocupada, pensando que no podía hacer mucho entonces y me volteé a hacer mi tarea en la compu.

Momentos más tarde, Finger dejó caer la cabeza sobre mi cama. Se sintió horrible, un golpe pesado y con un dejo de fatalidad espantoso. Me levanté de inmediato y lo empecé a llamar. No respondía. Y ya saben cómo maulla Finger y con qué regularidad. Total, me puse a zarandearlo y aún así no levantaba la cabeza. Por fin vi que estaba respirando, aunque con dificultad. Obviamente yo tenía pavor de que me levantara en la mañana para tomar el cuerpo inherte de Finger entre mis brazos e ir llorando al cuarto de mi madre. Pero cuando me decidí a dormirme y apagar la luz, Finger se levantó y se fue.

Más tarde en la noche regresó para despertarme con tonalidades de violín. Ahora todo está bien. Ya no tiene los ojos ni hinchados ni rojos. Sólo le quedan las cicatrices de la pelea. Quiero mucho a mi gato. Ojalá que a él también le queden unos doscientos años. Si no, creo que ya hay manera de clonar mascotas. Finger XV.